Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors

Los piratas del Caribe: la venganza de Salazar

Caratula de "Piratas del Caribe: La venganza de Salazar"

Crítica:

Público adecuado: Jóvenes

Después de una producción cargada de rumores sobre su presupuesto y la salud de su protagonista, llega con un año de retraso respecto al calendario previsto la quinta entrega de Piratas del Caribe, una saga que ya parecía agotada en la cuarta entrega. La venganza de Salazar no consigue disipar esa sensación.

Salazar, un pirata al que Jack Sparrow confinó al Triángulo de las Bermudas en su juventud, escapa junto a su tripulación fantasma en busca de venganza. La única posibilidad que tiene Sparrow de sobrevivir es encontrar el tridente de Poseidón, que le conferiría el dominio sobre los mares.

Piratas del Caribe: la venganza de Salazar es uno de los supuestos platos fuertes del cine comercial de este verano. Disney ha invertido una enorme suma de dinero para revitalizar una saga que le ha proporcionado grandes réditos, y a su protagonista Johnny Depp su personaje más popular y una nominación al Oscar. Para ello han fichado al español Javier Bardem como villano de la función (una vez superadas sus pasadas reticencias al cine comercial hollywoodiense), y a los directores noruegos de la sorprendente Kon-Tiki, sin duda unos artesanos con buena capacidad visual.

Por otro lado, después del tibio recibimiento a la anterior entrega, el guion pretende recuperar las señas de identidad de la película original, tanto que casi parece una repetición del mismo esquema. Y puede que ese sea el mayor problema de la película: la falta de riesgo y de sorpresa, todo tiene un aroma de deja-vu, una familiaridad sin la frescura de la película original. Johnny Depp tiene al personaje tan interiorizado que casi hace dudar de dónde empieza Jack Sparrow y dónde el propio Depp. Bardem, por su parte, cumple sin más con un personaje que le da la posibilidad de caer en el histrionismo sin ir en detrimento de la película. Todo se desarrolla de forma rutinaria y algo deslavazada, una película de entretenimiento correcta y olvidable.

En definitiva, una entrega que parece realizada por y para seguidores de la franquicia. El espectador ocasional, en cambio, puede encontrar algo tediosa la acumulación de set pieces de acción sobre una trama más bien escueta. Eso sí, se agradece el cameo de una leyenda de la música como es Paul McCartney.

 

 

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad