Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors

Suspiria

Caratula de "Suspiria"

Crítica

Público Recomendado: Adultos

En 1977 se estrenó una de las películas más famosas de la filmografía de Dario Argento, Suspiria.

Más de 40 años después nos llega un remake que renuncia a fotocopiar el original.

Susie es una bailarina americana que viaja a Berlín para estudiar en una prestigiosa academia de danza. Durante su primer día allí, una estudiante expulsada de la escuela aparece asesinada. Esto llevará a Susie a una investigación en la que descubrirá un terrible secreto asociado a la institución en la que ha ingresado.

La Suspiria original de Dario Argento es una de las obras clave del género conocido como giallo (“amarillo” en italiano), básicamente una serie de thrillers con elementos de terror, y marcados por una estética de colores intensos, interpretaciones histriónicas y puesta en escena enfática, con el abuso del zoom como rasgo más característico. Como es de imaginar, es un sub-género que ha quedado muy encapsulado en los años 70, a pesar del encanto kitsch que enamora a sus seguidores.

No es por ello extraño que el director Luca Guadagnino (después de su triunfo el pasado año con Call me by your name), haya renunciado conscientemente a las señas de identidad del giallo, y aún más, aspira a crear una obra totalmente distinta e independiente de la película de Argento.

De hecho, podríamos decir que el planteamiento visual es el contrario: una puesta en escena elegante y contenida, con una paleta de colores desaturada. Esto ayuda al director a transmitir un tono más melancólico y desesperanzado que la película original, que tendía más a un cierto caos narrativo en aras de un febril onirismo lisérgico.

La película de Guadagnino se sitúa en 1977 (curiosamente, el año de estreno de la película original) para plantear el trasfondo de una sociedad alemana aún dividida y consumida por un sentimiento de culpa por los crímenes pasados, con una violencia impregnada aún en el ambiente. La película plantea una sociedad matriarcal (no es casualidad que incluso el único personaje masculino de la historia esté interpretado por la actriz Tilda Swinton, en un desdoblamiento de papel) como solución apocalíptica. Un planteamiento muy en línea con ideas políticas actuales, que no estaba presente en la película de Argento.

En cualquier caso, en otro sustrato narrativo podemos detectar una idea mucho más poderosa e interesante, y es la necesidad del ser humano de recibir el perdón. Ese es el tema que puede conectar más con una realidad intrínseca a cualquier espectador.

Si bien es cierto que existen esos puntos de interés, la narración de Guadagnino no resulta tan hipnótica como la de Argento. El interés fluctúa debido a una duración exagerada, que deja una sensación de película interesante, pero enormemente irregular, y con algunas concesiones a planteamientos ideológicos de moda.

 

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad